Desfile de la entrada folklórica universitaria |
Esta es la semana de las “fiestas patrias” y por tanto,
estamos libres de nuestras obligaciones con los cursos. Volamos a la ciudad de
La Paz, estamos deseosos de conocer esta otra parte del país. El desfile de la
“entrada folklórica universitaria” es una sorpresa a nuestra llegada. Cada comparsa
de estudiantes desfila con un atuendo folklórico que les identifica. Hay mucha
fuerza en los bailes y originalidad en sus trajes. Nos da una idea de la mezcla
de tradición andina y modernidad joven que es la Paz.
Ciudad de La Paz. Volcán Illimani al fondo |
A 3.600 metros de altitud, las calles están llenas de vida,
con gente de un lado a otro, vendedores que cantan sus mercancías, tráfico
abundante en desordenado orden. Huele a cítrico recién exprimido y a humo de
muchos coches. La ciudad de La Paz es la pollera del volcán Illimani: una falda
llena de colores y movimiento. Las tres líneas de teleférico son hilos sobre
esta falda de multitudes: colores amarillo, rojo y verde. Por la noche, miles
de luces encendidas crean una filigrana de brillantes.
Visitamos lugares más o menos cercanos que llevan nombres de
astro: Fabia y Flor van a la Isla del Sol en el lago Titicaca, David y Palmira
conocen el llamado Valle de la Luna. Son lugares que nos impresionan.
Cumpleaños de Flor |
Durante la semana, ocurre un acontecimiento importante: ¡es el
cumpleaños de nuestra querida Flor! Lo celebramos como ella lo merece, con una
buena cena y una de esas “tortas” tan ricas y tan ricamente decoradas que
siempre miramos con ganas en las pastelerías. No faltan unas velas que soplar y
unas risas juntos.
Hay tiempo para conocer también el Parque Nacional Madidi. Volamos
a Rurrenabaque, para adentramos en la reserva. Vamos en un bote a través del
río Beni y después por el río Tuichi, en dirección contraria a las aguas que
acabarán en el Amazonas. Avistamos muchas especies de plantas y animales,
aprendemos sobre ellas. Representan sólo una pequeña parte de la inmensidad que
ofrece Madidi, pues es la reserva que alberga la mayor biodiversidad del mundo.
Entrada a Madidi por el río Beni |
Junto a un gran bibosi "pie de elefante" |
Una hormiga cortadora de hojas |
Es un viaje corto, pero lo vivimos con la intensidad de habernos
adentrado en la selva, de no haber sido meros espectadores: hemos caminado
entre su vegetación exuberante, nos hemos bañado en sus aguas, hemos dormido
entre árboles, hemos escuchado leyendas sobre animales y duendes, hemos
aprendido palabras en la lengua que aún suena en la zona, el tacana. No en
vano, la selva nos ha atrapado y puede decirse que nos ha enamorado también.
Calle Jaén, la más antigua de La Paz |
Helen nos mostró la ciudad de La Paz. Conocimos allí más
personas como ella: gente dulce, gente que lleva La Paz en sus ojos.
David fue nuestro guía en Madidi. Conocimos allí más
personas como él: gente que anda descalza por la selva, gente que conserva
sabiduría sobre sus plantas y continúa usando sus beneficios.
Ha sido una buena semana de descanso. Ya de vuelta en Santa
Cruz, nos sentimos con ganas de comenzar nuestra tercera semana de cursos. Con
certeza, conoceremos gracias a ello nuevas personas interesantes, como Helen y
David, como tantas otras durante las otras dos semanas de cursos. Próximo
destino: San Miguel de Velasco.
3 comentarios:
Gracias por hacernos sentir allí!!!! Muchísimas felicidades Flor!!!!!
Feliz cumpleaños Flor! Y muchas gracias por compartir vuestras emociones y vivencias. Seguro que hay mucho más que contar. Un cordial saludo equipo. Claudio
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